Me he tomado este blog demasiado en serio.

Desde que lo creé hace un tiempito atrás, me había propuesto escribir sobre lo que me diera la gana, y que solo “de mil en cien” escribiría cosas más serias o “de calidad”, como reseñas, cuentos y cosas así. De ahí fue que salió el nombre del blog.

Pero sucedió todo lo contrario. Cada vez que escribía algo, lo leía y lo releía hasta que me convencía a mí mismo de que era basura. En mi mente, nada era lo suficientemente bueno como para publicar; como para que el mundo entero lo viera. Ya había leído bastantes blogs malitos (mi opinión; no me insulten) y no quería añadir uno más a la colección. No quería aportar al internet palabras que no merecen ser leídas.

Y así fue como poco a poco el perfeccionismo fue afectando mi blog. Llegó el punto en donde hasta borré publicaciones para que no asociaran con mi nombre aquellas palabras, comentarios y chistes mediocres. Me estaba limitando yo mismo. Ese perfeccionismo luego se convirtió en procrastinación, porque cuando escribes con la intención de publicar pero no publicas lo que escribes, ¿pa’ qué escribir entonces? No solo dejé de publicar, dejé de escribir.

Pero hoy voy a cambiar todo eso. Quiero volver a escribir por placer. Quiero publicar aunque no esté 100% satisfecho con el contenido. Lo tomaré como mi taller privado de escritura, como una práctica… y si tengo que practicar en público, así será.

Por eso entro en este nuevo viaje como único sé adentrarme en nuevos hábitos: con un 30 day challenge. Estas son las nuevas reglas:

  1. Debo publicar mínimo una cosa diariamente durante 30 días. (Tampoco es como que pensaba hacer más de una al día)
  2. El tema es completamente libre, para no volver a caer en aquello de limitarme.
  3. De 250 palabras como mínimo, por eso de no aprovechar la falta de límite para ponerme demasiado vago y escribir menos.

Quisiera que publicar frecuentemente fuera un hábito continuo, pero vamos a empezar solo con estos 30 días y ver cómo nos va.

Si tienes un blog y quieres aprovechar el reto, te invito a que te unas y escribamos juntos por estos 30 días.

Nos leemos mañana. 😉